fácil de encontrar

No sé si viene o la busco. La soledad. Me dejo encontrar, quizá. El sol espléndido de un sábado de junio por la mañana. En casa. Con el youtube, con la música, sepultado por miríadas de cosas que debería hacer o pienso que debería hacer. La vacuna o un resfriado. Creo que tengo fiebre. Menos mal. Procrastinar es lo más satisfactorio del mundo. También escribo. Supongo que es una manera de saltar la nada. El muro. Ni sé qué separa, pero sea lo que sea, al otro lado estoy yo. En este, todo lo demás. Como un susurro. A veces llega a mí lo que podría haber sido. Todo el amor que pude dar. Todo lo que soy, todo lo podría haber dado. En silencio, aquí detrás, en grandes cajas de cartón, los últimos famobil, los tente, que subí de la cochera. Algo que no puedo entender, por qué los subí, por qué aún no soy capaz de abrirlos, y mirar. Me duele la rodilla. Lo notaba cuando he salido al súper. Recuerdo del finde de pesca pasado. La luna en la ventana del ...